Imagen: Refaat Alareer (1979-2023), poeta, periodista y mentor de numerosos escritores/as jóvenes palestinos colaboradores de la Electronic Intifada, que fue asesinado deliberadamente por un ataque israelí el pasado 7 de diciembre. El último poema que escribió decía así: «Si yo tengo que morir, vosotros tendréis que vivir para contar mi historia…» Referencia: https://beirut-today.com/2023/12/09/israel-targets-and-kills-beloved-poet-refaat-alareer/
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Recartografiando Gaza catorce años después [2009-2023]. Necropolítica y resistencias
Notas de trabajo de José Pérez de Lama / 2024/02/06-08 para un escrito de mayor alcance en colaboración con Miguel Mesa del Castillo
Entrada en proceso
En el año 2009, con motivo del ataque israelí a Gaza de aquel año —Operación Plomo Fundido— un grupo de arquitectos-profesores y estudiantes en torno a la Escuela de Arquitectura de Alicante [nota, referencias] hicimos un trabajo de cartografía de Gaza. Entonces Gaza era relativamente poco visible, y teníamos que imaginar muchas cosas a partir de las pocas noticias en los medios y en unas pocas publicaciones. El objetivo de aquel trabajo era precisamente aprender nosotros mismos sobre el tema y darle una mayor visibilidad pública. La referencia inmediata eran los trabajos, pocos pero importantes, de diversos investigadores —destacadamente Eyal Weizman [referencias]— sobre el uso israelí de la ordenación del territorio, la construcción de infraestructuras, el urbanismo, y la arquitectura, como una relevante arma de guerra israelí en contra de los palestinos de Cisjordania. Nuestro trabajo de entonces trataba de ver en qué medida las consideraciones de Weizman y otros eran extensibles a Gaza y qué variantes o novedades en cuanto a estas cuestiones podían allí identificarse.
En 2023 el ataque inicial de la resistencia palestina que desmanteló completamente las posiciones de la División Sur del ejército israelí —según la denominación de la propia resistencia, Al-Aqsa Flood— y el contraataque genocida de Israel sobre Gaza tienen mucha mayor visibilidad mediática de lo que ocurría en 2008-2009. Fundamentalmente, debido a las redes sociales del lado palestino y a los medios hegemónicos globales del lado israelí. Nuestra fuente principal de referencia para lo que trataremos aquí son los podcast de Jon Elmer para la plataforma global de comunicación propalestina The Electronic Intifada. Elmer es el analista militar de esta plataforma, pero como señala él mismo, para analizar esta guerra es necesario saber de historia y geografía, infraestructuras y tecnologías entre otras cuestiones, y sus exposiciones nos parecen de gran interés para la perspectiva que vamos a plantear. Otras fuentes, fundamentalmente de Internet, se irán reseñando según la ocasión.
Para una introducción:
Gideon Levy, veterano periodista israelí [vídeo, traducción del inglés]: https://www.tiktok.com/@sxlmita/video/7296127053563219232?lang=en
Soy israelí.
Nací en Israel.
Incluso me percibo a mí mismo como un patriota israelí.
Me preocupo por Israel.
Pertenezco a Israel.
Me siento apegado a Israel […]
No hablemos de simetría
porque no hay ninguna simetría…
Sugeriría incluso que no hay ningún conflicto.
¿Había un conflicto franco-argelino?
Lo que había era una brutal ocupación francesa en Argelia que llegó a su fin.
Y no hay un conflicto israelí-palestino,
hay una brutal ocupación israelí que tiene que acabar de una manera o de otra.
En nuestro patio trasero [parece estar hablando en el Reino Unido o algún otro lugar de Europa]
hay un régimen que es, hoy, con diferencia,
una de las tiranías más crueles y brutales en la Tierra.
Y sé lo que digo porque lo he cubierto [como periodista] durante cuarenta años.
Y éste régimen no puede definirse sino como un apartheid.
Dos pueblos viven un una misma tierra.
Un pueblo tiene todos los derechos del mundo
—y estos hablando ahora sólo de los territorios ocupados—
y el otro pueblo carece de cualquier derecho.
Parece apartheid,
habla como si fuera apartheid:
¡Es apartheid!
Y nadie puede contradecirlo.
Vayan al Valle del Jordán,
vean la prosperidad en los asentamientos [judíos, sionistas],
y luego vayan y vean a los palestinos,
que viven allí sin electricidad, sin agua, sin ningún derecho.
Y entonces díganme si es apartheid
o quizás puedan inventar otro nombre.
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Fechas: 2007 comienza el bloqueo o cerco de Gaza. Principales ataques de Israel a Gaza en 2008-2009, 2012, 2014, 2021 https://en.wikipedia.org/wiki/Gaza%E2%80%93Israel_conflict
Palestina Hoy (@hoypalestina en Tuiter 03/02/2024 / https://twitter.com/HoyPalestina/status/1753814159215472666 )
Resumen del GENOCIDIO EN Gaza:
-120 días de genocidio.
-2.325 masacres cometidas por el ejército de ocupación.
-34.238 entre asesinados y desaparecidos.
-27.238 asesinados que llegaron a los hospitales.
-12.000 niños asesinados.
-8.190 mujeres asesinadas.
-339 asesinados del personal médico.
-46 asesinados de Protección Civil.
-122 periodistas asesinados.
-7.000 desaparecidos, el 70% de los cuales son niños y mujeres.
-66.452 heridos.
-11.000 heridos necesitan ser trasladados a otros países para recibir tratamiento.
-10.000 pacientes con cáncer enfrentan el riesgo de muerte.
-99 secuestrados de personal de salud.
-10 periodistas secuestrados.
-2 millones de desplazados.
-700.000 pacientes con enfermedades infecciosas como consecuencia del desplazamiento.
-100 escuelas y universidades fueron completamente destruidas.
-295 escuelas y universidades parcialmente destruidas.
-183 mezquitas completamente destruidas.
-264 mezquitas parcialmente destruidas.
-3 Iglesias atacadas y destruidas.
-70.000 viviendas quedaron completamente destruidas.
-290.000 viviendas parcialmente destruidas.
-66.000 toneladas de explosivos arrojados por Israel.
-30 Hospitales fuera de servicio.
-53 centros de salud fuera de servicio.
-150 instituciones de salud fueron parcialmente atacadas.
-122 ambulancias destruidas.
-200 sitios arqueológicos y patrimoniales destruidos.
NO ES GUERRA, ES GENOCIDIO.
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En cuanto a las estrategias espacio-territoriales pueden verse múltiples novedades, tanto desde el lado israelí como, quizás más innovadora y sorprendentemente, del lado de la resistencia palestina. Si en 2008-2009 la superioridad y la hegemonía militar de Israel nos parecía apabullante, en 2023 lo nuevo parece venir sobre todo del lado de la resistencia, tanto en el día en que se inicia la actual fase del conflicto, el 7 de octubre de 2023, como posteriormente en la resistencia ante la invasión israelí, la llamada en su momento ground invasion (invasión terrestre). Del lado israelí también existen, por supuesto, nuevas estrategias, tanto por la ferocidad del «posible» genocidio —según la resolución preliminar de la Corte Internacional del Justicia y el juicio de numerosos expertos en la materia— como en el uso de ciertas tecnologías como es el caso de la Inteligencia Artificial.
Para este análisis de las dimensiones espacio-territoriales de Al-Aqsa Flood y el contraataque sionista, consideraremos una idea amplia, compleja y algo fluida de territorio. El territorio para nosotros serían la composición del soporte, en su sentido tradicional, del medio físico, y de la población que lo habita y sus actividades, incluyendo ciclos materiales y energéticos, infraestructuras, construcciones, tecnologías (incluso media), y también, discursos sobre el propio territorio y relaciones con entornos más amplios, como por ejemplo las que se producen a la escala geopolítica de la «cosmópolis».
Un primer listado de asuntos que nos gustaría tratar es el siguiente:
Del lado de la resistencia palestina:
* El ataque quirúrgico del 7 de octubre contra el cerco tecnológico —inteligencia, videovigilancia en diversos niveles, áreas de protección, nidos de ametrallladoras robotizadas… Usando drones y otros medios tecnológicos avanzados la resistencia palestina desarticuló la barrera ultratecnológica y llevaron a cabo ataques de precisión a los nodos militares y asentamientos paramilitarizados del entorno de Gaza, desarticulando por completo y tomando prisioneros a los jefes de la división o comandancia Sur del ejército israelí. El ataque tomó por sorpresa al ejército ulrtratecnológico israelí que tardó según parece muchas horas en reaccionar. En 2009 estudiamos la demolición en diversos puntos de la valla de la frontera sur en Rafah, que interpretábamos como un extraordinaria acción de urbanismo instantáneo. En 2023 el ataque a la frontera fue mucho más importante y sofisticado.
* La nueva red de túneles como «infraestructura contra el genocidio» según la califica Jon Elmer. Se estima que se trata de un sistema con topología de red —como la idea de Internet en su fundación— con una longitud total que podría llegar a los 700 km, en alguna de cuyas zonas pueden circular coches, organizada en cinco niveles de profundidad, hasta los 80 m, y que hasta la fecha sólo ha sido identificada por los israelíes entre un 20 y un 5% según la estimación de diferentes analistas. Si en 2008-2009 habíamos estudiado el sistema de túneles bajo la frontera de Rafah, que se usaban principalmente para el abastecimiento, desde entonces la red se ha hecho mucho más compleja, incluyendo túneles de ataque que según parece se abren ad hoc casi el pie de las posiciones israelíes cuando están en el interior de Gaza para emboscadas y cosas parecidas.
* El desarrollo de un arsenal DIY, supuestamente hecho en los propios túneles durante la última década, con ingeniería inversa palestina, en buena parte a partir de armas ligeras de origen ruso especialmente adaptadas para la guerrilla urbana, y diseñadas para atacar específicamente los dispositivos israelíes como los tanques Merkava de última generación. Unos guerrilleros en ropa deportiva con los lanzagranadas RPG ligeros con las cabezas Yassin 105, por ejemplo, fabricadas en la propia Gaza, y extremadamente económicos, vienen destruyendo los tanques israelíes y otros vehículos militares como la topadoras-excavadores producidos en la cadena global high tech del Imprerio. Un Merkava 4, por ejemplo, una fortaleza ambulante, cuesta varios millones de dólares, y según los analistas, la resistencia ha destruido ya muchos cientos de estos vehículos [verificar datos]. El pionero mítico de la industria militar de Hamás fue el ingeniero Adnan Al-Ghoul Abu Bilal — Al-Ghoul el nombre del rifle de los francotiradores gazatíes. Las Yassin 105 reciben su nombre de otro líder histórico de Hamas, Sheik Ahmed Yassin.
* Uso del propio paisaje de la destrucción y el conocimiento detallado del territorio como arma de combate. Esto sería sin duda una característica de la guerrilla urbana que venimos viendo desde hace décadas en la región, cuyas tácticas, probablemente, se hayan ido transmitiendo y acumulando entre los diferentes grupos regionales afines a la resistencia palestina, entre otros Hezbolá en el Líbano. Elmer lo plantea como una respuesta y una inversión de la estrategia del «caminar atravesando muros» de la que se jactaron los israelíes en 2008-2009 y que supuestamente se había inspirado en las ideas de Deleuze-Guattari sobre el espacio liso, el espacio poroso…
* Uso innovador de los media. Parte del prestigio de Israel es —o era— el de ser una start-up nation con una relación especial con las tecnologías digitales e Internet, y las redes sociales, en buena parte a través de sus servicios de inteligencia. En Al-Aqsa Flood, sin embargo, la resistencia palestina parece que va ganando la guerra informativa, a pesar de la enorme influencia de la propaganda, no exenta de tremendas fake news, israelí. El uso de los media por parte de la resistencia palestina tiene al menos dos aspectos. El primero es el que viene haciendo la población palestina en general, y en particular los periodistas profesionales y aficionados, usando las redes sociales, y contando con el apoyo de cadenas televisivas que se ven masivamente en los países árabes y el Sur Global, como pueda ser la qatarí Al Jazeera. Se dice en las redes que es el primer genocidio cuyas víctimas lo están retransmitiendo live. En 2008-2009 esto no era así. Las redes sociales eran mucho más limitadas. La relevancia de este trabajo se constata por los repetidos esfuerzo de Israel de cortar todos las comunicaciones a la población gazatí, y por el asesinato deliberado de periodistas, con la mayor frecuencia bombardeando las casas donde viven con sus familias extensas, haciendo desaparecer familias enteras. Según diferentes analistas [referencias] se trata del conflicto bélico en que más periodistas han muerto — unos 122 según ciertas estimaciones a 3 de febrero de 2024, tras 120 días de agresión; uno por día.
El segundo aspecto innovador del uso de los media es el que vienen haciendo los propios grupos militares de la resistencia (Brigadas Qassam-Hamás, Saraya Al Quds, Hezbolá…) de las redes sociales, en especial con canales de Telegram, y dentro de esto el uso de vídeos de una enorme eficacia comunicativa y expresividad. Por hacernos una idea, los diferentes grupos emiten semanalmente a las redes una docena larga de vídeos en los que muchas veces se ven imágenes de los combatientes urbanos tomadas con una cámara Go-pro colocada en la cabeza. Por el estilo de edición y el uso de ciertos recursos gráficos característicos, las imágenes recuerdan imágenes de vídeo juegos tipo first-person shooter, en los que se los ve acercarse a pocas decenas de metros a cuerpo descubierto y disparar a los tanques israelíes, evitando con esta proximidad el buen funcionamiento de los sistemas de intercepción automatizada —Trophy system— que incorporan estos vehículos. En varias ocasiones se los ha visto acercarse corriendo hasta a los vehículos acorazados para adosarles bombas magnéticas que explotan a los pocos segundos. Como cuenta Jon Elmer, contrasta el valor temerario de los combatientes palestinos, que puede verse semanalmente en estos vídeos, con los bombardeos a distancia de barrios y familias enteras de los israelíes. Estos vídeos que la resistencia edita casi en tiempo real, se publican también en las cadenas de televisión árabes, alcanzando grandes audiencias globales del Sur, lo que explica en buena parte la admiración y el apoyo masivo a los palestinos en estos países, frente a la tibieza de la mayoría de sus gobiernos. Llamaba la atención hace unos días a unos colegas diciendo que las innovaciones de la resistencia palestina en 2023 podrían compararse a las innovaciones con que nos sorprendió el uso de Internet en 1994 por parte de los zapatistas mexicanos.
Son una incógnita para mí las redes de comunicación al interior de la resistencia palestina y de ésta con el exterior, que parecen seguir funcionando con los apagones periódicos con los que Israel ha sometido a Gaza, y que aparentemente no está pudiendo ser espiadas por los sionistas. Leo a Antony Loewenstein en una entrevista sobre sistema de comunicación anteriores: «[…] alguien decidió un año antes del 7 de octubre detener la escucha de las radios de onda corta y walkie-talkies de Hamás. Quién sabe por qué. Ahora suena como una locura y una temeridad.»
* La recomposición del orden geopolítco global y el desenmascaramiento de Occidente y de Israel como presuntos defensores de la democracia, la civilización, los derechos humanos… La emergencia del Sur Global como gran actor político, como ejemplifica el liderazgo de Sudáfrica ante la Corte Internacional de Justicia, el voto mayoritario de apoyo en diferentes asambleas de la ONU y el cada vez mayor aislamiento de los EEUU y las potencias europeas, a los que en ciertas instancias se comienza a llamar el «Eje del genocidio». El caso de Yemen bloqueando el tráfico marítimo con destino a Israel en el mar Rojo, y siendo bombardeado por EEUU y el Reino Unido en represalia, es en este aspecto del mayor interés. Como lo es el mayoritario posicionamiento de la población mundial — en manifestaciones, redes y acciones directas — en contra del genocidio, a la vez que los gobiernos y la clase política de países como EEUU, Reino Unido, Alemania y otros, apoyan explícitamente, con dinero y armas a Israel.
Los sacrificios de la población civil, de Cisjordania y el sur del Líbano. Hay que destacar que a pesar de todos estos logros de la resistencia militar palestina, la población civil es la que está sufriendo los extraordinarios rigores de la guerra, la limpieza étnica, el desplazamiento de ya casi dos millones de personas a una zona minúscula al suroeste de la Franja de Gaza. Y tal vez en una media algo menor, el levantamiento de los palestinos y la guerra de baja intensidad de Hezbolá en la frontera del Líbano e Israel también están suponiendo un altísimo coste para estas poblaciones. Resulta muy difícil hacer una valoración. Los logros en cuanto a sensibilización de la causa palestina y el desenmascaramiento del colonialismo, el apartheid y el genocidio israelí por un lado, y el enorme sufrimiento de la población palestina por otro. Aunque como también sabemos este sufrimiento no empezó el 7 de octubre de 2023, sino que según se dice habitualmente empezó hace setenta y cinco años.
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Del lado de Israel:
Como ya señalábamos en 2008-2009, Israel usa Palestina y Gaza como un laboratorio para poner a prueba sus estrategias de control y sus tecnologías militares que luego exporta como «probadas en combate» al resto del mundo… Ver, vg, Antony Loewenstein y otros; o en el contexto español, Alejandro Pozo recientemente en ctxt.es.
Necropolítica. Si en 2008-2009 recurríamos a Giorgio Agamben que nos sugería interpretar Gaza como un lager o campo de concentración en el que se daba un estado de excepción permanente, en 2023 parece oportuno recurrir al concepto de necropolítica, política de la muerte literalmente, propuesto por Achille Mbembe — que ha sido también adoptada por algunas feministas españolas como Helena Maleno o Yayo Herrero [referencias]. Mbembe define la necropolítica como un rasgo esencial del colonialismo en el que la muerte y la violencia, no serían excepciones, sino que constituyen estrategias fundamentales del ejercicio del poder. Es una crítica de la idea foucaultiana de biopolítica que se interpretó suponiendo que en la Modernidad el poder se había hecho mucho más «blando», ejerciéndose sobre todo a través de la administración de la vida, siendo el recurso a la violencia más la excepción que la regla.
* Entre la innovaciones espacio-territoriales relativas en esta guerra por parte de Israel está la del urbicidio o territoricidio llevados a un nivel tal vez más radical y más visible globalmente de lo que nunca antes había sucedido. (El término urbicidio quizás venga de la guerra en los Balcanes en la década de 1990.) En 2023 el ejército sionista alentado por su gobierno y por parte de la opinión pública israelí se ha empleado en la destrucción sistemática de las infraestructuras que hacen posible la vida, desde las infraestructuras en su sentido más tradicional, como viario, agua, electricidad o comunicaciones, a los equipamientos o infraestructuras sociales como colegios y hospitales, universidades, panaderías, mezquitas, iglesias, cementerios, así como los lugares patrimoniales que constituyen parte importante de la cultura y la memoria de Gaza. También se ha destruido un porcentaje enorme de las viviendas, en ocasiones, en especial en Gaza City, Shujaiya, Jabaliya… demoliendo barrios enteros con bombardeos o explosivos. Y el espacio público.
* Uso sistemático de las fake news. En 2023 Israel y sus aliados han usado de forma intensa las llamadas fake news, noticias falsas, como propaganda de guerra. El caso de la decena de bebés pretendidamente decapitados el 7 de octubre que luego se demostró rotundamente falso, y que fue repetido en público hasta por el presidente de los EEUU, sería un caso representativo de una larga lista de mentiras y medias verdades, que los medios hegemónicos de Occidente han reproducido de forma acrítica. El precedente de la historia de la guerra de Irak iniciada con otra afirmación que luego resultó ser falsa resulta evidente. Por supuesto, el uso de la desinformación y la propaganda como armas de guerra es bastante antiguo, pero posiblemente el desarrollo del entorno digital ha multiplicado su relevancia. Ya en 1996 el geógrafo Edward Soja hablaba de una nueva geografía de Los Ángeles estrechamente relacionada con este tipo de producción mediática a la que llamaba Sim City, la ciudad simulada.
* Uso de IA como arma de guerra. Dos son los sistemas de Inteligencia Artificial que viene empleando el ejército israelí que hasta la fecha han sido dados a conocer por los medios. Es de suponer que habrá más. Uno de los sistemas se llama The Gospel, que puede traducirse como el Evangelio o la Palabra de Dios. Su finalidad es identificar los objetivos para los bombardeos cruzando datos de vigilancia e información. Medios como The Guardian por ejemplo [confirmar] lo han calificado como un arma de asesinatos masivos: si antes el ejército israelí era capaz de identificar 50 objetivos al mes ahora con el Gospel es capaz de identificar 100 al día. Nimbus es otra de las herramientas sobre las que se ha podido leer en Twitter —por ejemplo: empleados de Google protestaban por la colaboración del gigante tecnológico con el gobierno israelí para el desarrollo de los nuevos asentamientos en Cisjordania, práctica calificada como crimen de guerra por Naciones Unidas, para lo cual se emplearía Nimbus. Otra de las grandes tecnológicas que se cita por su colaboración con Israel en el desarrollo de tecnologías necropolíticas es Amazon [ver referencias].
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Estos son unas notas de trabajo muy preliminares. Sería necesario explicar mejor las dimensiones espaciales de las diferentes cuestiones apuntadas. Nuestra experiencia de 2008-2009 es que cuando estas prácticas se dibujan o diagramatizan sobre el mapa tienden a comprenderse mejor sus dimensiones territoriales o territorializadoras. Es un trabajo pendiente, aunque ya pueden verse algunas cosas en las redes.
Algunos materiales de apoyo:
Sobre Israel e IA, The Gospel:
https://www.newarab.com/analysis/gospel-israels-controversial-ai-used-gaza-war
Protestas de empleados de Google por su colaboración con el proyecto Nimbus; tweet de Btnewsroom 15 Dec 23 [captura]
Sobre la colaboración de Amazon con el ejército israelí:
https://jacobin.com/2023/08/amazon-ai-israel-palestine-apartheid-surveillance
… years since, companies like Amazon have powered what a recent Amnesty International report dubbed “automated apartheid.” Amazon announced just recently that it would invest another $7.2 billion in Israel through 2037 and extend its web services to the country.
The company claims the benefactors of Amazon Web Services (AWS) will be “Israeli entrepreneurs and businesses.” In reality, the primary winner will be the military. AWS will expand “Project Nimbus,” which provides the cloud service ecosystem for Israel, primarily serving the country’s military. (Google also invests in Project Nimbus.)
The ties between Israel and Amazon run deep. As of 2019, Israel Aerospace Industries (IAI) had been supplied by Amazon with 80 percent of its aircrafts. Buoyed by Amazon’s investment, IAI is implementing autonomous “robo-snipers” and drones across Gaza and the occupied West Bank.
Sobre la dependencia española de Israel debido a los vínculos de las industrias militares y de la vigilancia:
Sonbre Palestina como laboratorio de la industria militar de Israel, entre vista con Antony Loewenstein, autor de El laboratorio palestino (2024): https://www.elconfidencial.com/mundo/2024-02-18/israel-laboratorio-palestino-antony-loewenstein_3832759/
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